Pesá! di ya!

Tres semanas sin hacerse una paja. Pensaba, en su ignorancia de principiante, que asi llegaria con mas potencia al reencuentro con su amada, que conseguiria por fin no dejarla con las ganas, teniendo que lamerla la tapa del yogur una vez mas, decepcionado por no encontrar el premio, mientras ella se hacia el harakikiriki! con la polla de plastico que le habia regalado su hermana pequeña tras una cena familiar en la que se fueron al balcon a hablar.

No habia sido facil, habian estado en contacto permanente con el msgr, mandandose fotos cada vez mas atrevidas, fantaseando, con la confianza y el atrevimiento que daba la distancia. Haciendo que sus huevos pasasen del convenio y curraran horas extra, sin escuchar a su cerebro pidiendo que pararan las maquinas, que habia regulacion, que ya les llamarian cuando hubiera necesidad.

A parte de esas tres ultimas semanas de ansia donde tuvo que dejar de ir a la playa para no ver ni un culo mas en tanga, el tiempo en Australia se le habia pasado rapido. No como el año anterior en Alabama, donde sintio vivir en el corredor de la muerte, esperando que cualquier dia llegara la hora de pedir su ultima cena, su bocadillo de oreja y un par de miaus. Esta vez, regresaba incluso con una oferta de trabajo en la maleta, por si queria volver, recompensando de alguna manera su decision de seguir con la carrera cuando todo el mundo le decia que pa que. Pero claro, eso no lo podia decidir sin consultarselo a ella en persona, despues de, como esperaba, haber hecho que se corriera con el dentro. Porque aunque queria que ella aceptara, tambien sabia que corria el riesgo que se le riera en la cara, que le dijera: "a vivir a Australia? tu estas tonto, cari". Prefiriendo quedarse en ese puto barrio de ese puto pais de funcionarios y parados solo interesados en saber que cojon tiene mas largo Cristiano Ronaldo, mientras van quejandose de lo caro questa todo cuando pasean de la mano por el mediamart.

Con esos pensamientos y un koala de peluche en la mochila embarco nervioso en el vuelo de Qantas destino Barajas via Bombay. Nervioso pensando en su recibimiento y en cual seria su respuesta, pero nervioso tambien por si pitaba al pasar por el detector de metales y el tipo con cara de jugador de rugby decidia que tenia que cachearle sus doloridos huevos a punto de reventar.
Al tedio del vuelo ya estaba acostumbrado, asi que tras tres tristes gintonis y mientras que por los cascos se mezclaban las voces de una desas "comedias romanticas" que nunca habia visto pero que tenia ya muy vista, se quedo traspuesto. Dandole sin querer al play de su inconsciente, empezando una pelicula de bajo presupuesto donde veia como llegaba a Madrid y se llevaba a su novia clavada en la polla desde el aeropuerto al piso alquilado, donde proseguia el metesaca frenetico que culminaba, por fin, en la ebullicion efervescente del placer orgasmico, soltando ella un alarido tan real que creia estar oyendo de verdad, y que fue seguido al instante de un calambrazo que le recorrio la medula espinal, despertandole, sonriente pero consternado, porque pensaba que se les habia olvidado el bocata de oreja y moria electrocutado, castigado sin cenar.

Abrio los ojos y vio la pantalla donde Harry y Sally se seguian encontrando. Se miro entonces el regazo y vio el regalo, un lamparon de semen que teñia sus pantalones kakis de marron grisaceo sobre el bulto todavia palpitante del que se retiraba ofidica una mano... Todavia dudando si dormia o no, giro la cabeza hacia su extrema derecha, desconociendo el protocolo de la paja furtiva, temiendo que hubiera sido un abuelo gay de esos que van a Tailandia en plan jesucristo, pidiendo que dejen que los niños se acerquen a el. Pero no, sus temerosos ojos encontraron los ojos vidriosos de una niña trastornada que le miraba atrapada tras lo que parecia una careta de Halloween que matasellaba el cambio de sueño a pesadilla con un escalofriante:

-"Yo no se na...", antes de levantarse y perderse tras las cortinillas del business class, dejando tras de si un punzante olor a azufre que reclamaba a gritos su supremacia sobre el aroma agridulce del incomodo lechazo que se empezaba a enfriar.

-"Espera... espe... es... pe... p...", dijo el, mientras perdia la esperanza su ereccion.

En Madrid, tras el control de pasaportes y convencer a su maleta que bajara del tiovivo del jetlag, fue al servicio, y como no queria que hubiera sospechas a la hora de desnudarse esa noche, se dio un aclarado con el agua que quedaba en la taza tras tirar tres veces de la cadena y se cambio los pantalones. Luego se afeito rapidito para no rasparle los labios por si, como se temia despues de habersele derretido el sueño, volvia a fallar su plan y se dio una pasada de rolon bajo los elitros porque ya que se ponia para que iba a escatimar. Respiro hondo tres veces y cruzo la meta, el letrero de nada que declarar.

Al otro lado de la puerta automatica se dio de bruces con el muro que suponia el gesto de decepcion colectiva de familiares y amigos que no eran los suyos. Empezo a buscar espectante el rostro que en su ultima comunicacion le habia adjuntado una foto comiendo un platano en el mensage que decia que le iria a buscar. Le sono el movil, miro enseguida a ver si era ella, pero le daba la bienvenida Movistar. Acabo el paseillo del pasillo humano y lo volvio a recorrer por detras, sin suerte. Se sento en un banco para llamar y, justo cuando habia terminado de marcar, escucho como la quinta de betoven le anunciaba quien era la chicha que a toda prisa entraba en esos momentos en la terminal.

-"Mi vida!", grito, haciendola girar.

-"Alberto!", respondio ella, para de un salto abrazarle de brazos y piernas al tiempo que le empezaba a besar, disipando cualquier duda, notando como el amor volvia a invadir sus huevos, como se empezaba a empalmar, como el sueño de irse a vivir a Australia tendria que esperar, como la pesadilla no habia hecho nada mas que comenzar...

OToño

Aquella tardenoche, cuando el sol iba de nuevo a ahogarse irremediablemente en el horizonte y las farolas empezaban ya a dar la cara, el cielo no pudo contenerse mas las lagrimas y por fin decidio desahogarse tras meses y meses de guardarselo para sus adentros. De inmediato, los rios aparecidos de la nada mandaron las bocas de alcantarilla a hacer gargaras. Pero no paraba, el cielo seguia llorando desconsolado. Haciendo de cada confluencia de calles una laguna que coagulaba el trafico, espeso de por si por la hora y una dieta poco equilibrada. Provocando su lamento una trombosis de agua.

Ella no es que con las prisas de ir a currar se hubiera olvidado el paraguas, es que aquella mañana habia salido de casa convencida que todavia era verano. Ademas, era viernes y habia quedado, asi que sobre su tanga de guerra iba la falda blanca que se habia comprado hacia dos dias en las rebajas del Mango. La misma falda empapada que al mirarse en el cristal de la parada del autobus se habia disuelto en nada. Como si fuera de papel fotografico. Revelandola. Dando gracias a dios por haberse rasurado el bikini la noche anterior en la bañera antes de hacerse la paja de antes de irse a la cama, pero cagandose en la virgen, su puta madre. Se sintio observada y, como no tenia el coño pa ruidos, aprovecho que un taxi amerizaba junto al bordillo para desembarcar su pasaje para izar la mano cual defensa central pidiendo fuera de juego al tiempo que este levantaba la bandera, concediendolo.

Tras la conversacion impersonal de rigor mortis, ya sabes: el "donde va?", el "calle tal, Bar Talcual", el "parece el diluvio universal", el "limporta si fumo?", el "fume, fume", el "va usted calada...", el "que? que quiere una calada?", el "no, no, que va empapada... digo", el "su puta madre lo que ha caido en un minuto...", el "si quiere pongo la calefaccion un poco?", el "pues si no le importa", el "no, no, si ademas sestan empañando los cristales", el " me puede dar un par de klinex desos del salpicadero para secarme la cara?", el "hombre claro, ahi tiene la caja, coja los que le hagan falta", tras todo eso y varias miradas subrepticias por el retrovisor a traves del humo para confirmar que lo que habia visto dar relieve a los pliegues de la blusa adherida a la clienta eran en efecto un magnifico par de tetas de pezones respingones, le llego a ella un mensage guarro en el movil que la dejo todavia mas mojada por dentro que por fuera y que la hizo sonreir, haciendola cosquillas.

Amainaba. Y ella volvio a releer el texto, buscandole mas jugo, como cuando en nochevieja le volvia a dar otra pasada a las patas de las necoras. El, por su parte, aprovechaba un semaforo en rojo para reposicionarse discretamente la polla que de motu propio se crecia incomodamente bajo el peso de sus piernas. Tras un segundo en verde, sono el claxon del impaciente del Ibiza tuneado que llegaba tarde a su cita con un accidente en la autovia. Levantaron la cabeza al unisono, como si el que les hubiese pitado fuera el retrovisor. Y alli sus ojos se encontronizaron, deteniendo el tiempo momentaneamente. Hasta que al tercer pitido y una rafaga de largas puso el intermitente y se echo a un lado.

-"Gloria...? mira que me sonaba la voz, pero no te habia reconocido!", dijo el, girandose con dificultad en el asiento debido a su barriga cada vez mas amplia, como su sonrisa, sin poder controlar sus ojos que se escaqueaban escaneandola de arriba a abajo.

-"Coño Toño, yo tampoco te habia conocido, no sabia que ahora eras taxista", dijo ella, con bastante menos entusiasmo, cruzando inconscientemente las piernas y despegandose del pecho la blusa todavia mojada al ver sus ojos caer en picado.

-"Ya ves, al final cerraron lampresa y con el finiquito... lo tengo a medias con otro... no me va mal... aunque son muchas horas...", hablaba Toño, sin pensar, obligado por los nervios de ver de nuevo a su ex novia y la congoja de tener todavia los huevos llenos de amor por ella, "... no has cambiado nada, bueno, que digo?, estas incluso mas guapa...", seguia hablando, aunque ya cada vez mas consciente que ella habia dejado de mirarle, en parte porque acabo del dichoso Toño hasta el susodicho chocho/coño* y en parte porque veia como el taximetro seguia contando. "Tranquila", dijo el al levantar la mirada y percatarse, "estas invitada, faltaria menos...", al tiempo que le daba a la tecla de apagado, "... deberiamos quedar un dia a tomar algo...", seguia, atusandose el flequillo intentando esconder sus entradas de reventa.

-"Toño por favor, arranca o me bajo". Dijo por fin Gloria, sin disimular su asco.

-"Gloria, dame otra oportunidad... podemos empezar de nuevo... sabes que yo todavia te quiero...", dijo el, repitiendo el guion del dia que ella se fue, como atrapado en un bucle de culebron venezolano.

-"Oh, Toño, dejame en paz!" y despues Gloria salio del coche dejando tras de si un portazo.

Toño la vio alejarse calle abajo, pero la añoranza del amor perdido y el impulso animal del que ya solo follaba pagando le llevaron a salir del coche y seguir sus pasos.
Al poco rato vio como Gloria llegaba a la puerta del Talcual, donde un gorila machote la levanto del suelo con un abrazo de oso amoroso que la hizo perder el sentido y las chanclas. Luego, antes de darse la vuelta, vio como se enzarzaban en una pelea de lenguas que acababa dejando caer su alma al suelo como un zurullo sobre parquet recien encerado (justo al final del video, no te lo pierdas).

Cuando volvio al taxi lo primero que hizo antes de sentarse fue mirar el asiento trasero, por si Gloria se habia dejado una excusa, algo, para despues reencontrarse con ese mismo sentimiento de vacio que sintio su corazon hacia tres años, el vacio que deja en la tapiceria de un taxi la huella de un, todavia, perfecto culo mojado. Y aunque la tormenta parecia que habia pasado por completo, volvieron a caer gotas. Pero esta vez era Toño el que llovia desconsolado, mientras una vez mas ponia en el estereo del coche su cancion (si, esa, ya sabes donde encontrarla), derramando un diluvio de lagrimas que, como todos los otoños que se habia comido desde su marcha, le supieron a Gloria.



*(delete as appropiate)

Lechen polvo

Si te soy sincero
creo que estas sobreactuando,
total, que es un trocito de piel?
comparado con ese pelancano negro
asomando cual sutura de tu aureola saturada.
Si se que te vas a poner asi
en vez de arrancartelo con los dientes
de raiz
mira!
te lo habria enroscado al pezon
para que dejaras de manar leche cuando estamos follando
que ademas de ponernos a mi y a tu primo el nordico perdidos,
esta la cosa como para andar tirandolo.

Pis and love

Se levanto de la cama porque se estaba meando, notaba como su vejiga contenia la respiracion con los carrillos inchados, como un judini de provincia, de esos que se meten en un tanque lleno de agua, con camisa de fuerza y encadenados, pataleando y retorciendose porque no encuentran la llave del candado. Se sujetaba el vientre a cada cuidadoso paso, como quien se sujeta un flemon. Abrio la puerta del baño, noto el frescor de las baldosas en las plantas de sus pies y subio la tapa del vater para derretirse, para dejarse fluir y abandonarse al gustazo.
No sabia ni que hora era y apenas podia abrir los ojos, cubiertos de arena por el oleaje de la resaca. Todo parecia codificado. Nada mas abrir las compuertas noto una sensacion extraña, algo que no cuadraba. Corto el riego de inmediato. Volvio a abrirlo, pensando que igual se lo habia imaginado, que su cerebro todavia estaba soñando. Pero no, persistia esa inesperada sensacion de calorcito alrededor del glande, como cuando se metia en la bañera y en cuclillas iba bajando hasta que solo sus pies y su polla descapullada tocaban el agua, caliente, pero no tanto. Siguio meando sin poder contener mas las ganas, al tiempo que bajaba la mirada para intentar ver que le podia estar pasando, como quien escucha un ruido en la calle y mira a traves de las persianas, con mas aprension que miedo, con la intencion de ver sin ser visto, con esa actitud tan suya de a mi no me metas en lios yo no se nada. A su boca se le escapo entonces una sonrisa amplia, como cuando lleva treintayuna y va de mano. Se quito con cuidado el condon deformado por el medio litro de pis acumulado y lo elevo a la altura de sus ojos para saciar su curiosidad innata.

-"Que haces? ven a la cama...", dijo la voz que venia de la parte oscura de la casa.

-"Mmmmn", dijo el, todavia transfigurado por lo que se traia entre manos, deteniendose a apreciar lo maravilloso de la luz que se reflejaba a traves del plastico en forma de jarron de gelatina, adivinando sus coagulos de esperma en aquellas viscosidades con forma de escupitajo que ondulaban como burbujas en una lampara de lava.
Escucho entonces el ruido de fondo. Un timido redoble de mono mecanico tocando su tamborcito metalico. Al mirar al suelo vio que era el sonido que hacia un hilillo de pis al chocar contra la carcasa del calefactor de aire. Giro el condon y descubro entonces la parabola en forma de arco como si descrita por un saltador desos machotes de Acapulco, se quedo estupefacto. Durante un buen rato. Sintiendo las cosquillas al tiempo que crecia el charco alrededor de sus pies descalzos.
Hasta que la presion del condon decrecio y este dejo de desangrarse. Tiro de la cadena y el estruendo del remolino que se tragaba su miseria le acompaño hasta el dormitorio.

Se acerco sigiloso y se metio en la cama. Se tapo con el edredon hasta los sobacos y con los ojos ya en abierto fijos en el techo, dijo:

-"Estas despierta?".

-"Mmmm?", respondio la almohada.

-"Ya no te quiero..."

Amor propio

Nada mas salir de la carcel se apunto a un curso de yoga que daba uno que conocio dentro que decia que habia aprendido entre chute y chute siendo hippy en Goa. Era consciente que a sus años era un poco tarde para empezar a contorsionarse, pero lo veia como una inversion y de inversiones originales el sabia. Si a los tres meses conseguia llegar a chuparse la polla seria un gasto semanal mas que se ahorraba, ademas de la gasolina del viaje de ida y vuelta hasta el poligono industrial y la aprension que el riesgo de dicho viaje siempre le habia provocado.
Asi estaba esa tarde, practicando, tumbado en el suelo sobre la alfombrilla del baño, desnudo menos por sus calcetines de punto blanco, con los pies en alto y medio indice en el culo, intentando doblar lo suficientemente el espinazo como para llegar a introducirse el capullo en la boca y llegando tan solo a tocarse la punta con lengua en los momentos que conseguia aguantar la respiracion al maximo. Ignorando los teletipos de dolor que las cervicales mandaban a su cerebro, ensimismado, concentrado como un halterofilista con obcion a medalla. Deseando ser un gato. Y asi le pillo su madre, en el justo momento que se disparaba a boca jarro, salpicandose el bigote, la nariz y los ojos, aunque el no la vio porque sabia que se corria y los tenia cerrados.

-"Aqui tienes la muda...". Murmuro su madre, sin tiempo a quedarse idem, dejando sobre la taza del vater unos gayumbos y una camiseta damartermolactil recien planchados. Mirando a su hijo con esa cara de circunspeccion que solo pueden poner las madres arrependidas de no haber abortado. El no dijo nada. Apenas pudo ver la sombra entre los parpados medio cerrados por el pegamin vital y el resplandor de la bombilla de 60 vatios. Se incorporo dolorido, se trago su amor propio y se limpio la cara con la muda, todavia calentita, como recien sacada del horno. Se miro al espejo y vio que, "vaya", se habia dejado una estalactita en el lobulo de la oreja que bien podria haber sido una lagrima de su subconsciente llorando desconsolado. Se dio un enjuague de listerine que le hizo cosquillitas en el gaznate y tras una ducha rapidita se presento de nuevo al mundo fingiendo una sonrisa nerviosa de concursante en apuros, como si nada hubiera pasado.

-"Que hay de cenar?", le dijo a su madre, asomando la cabeza por la puerta de la cocina.

-"Ah! pero todavia tienes hambre?", respondio ella, que desde lo sucedido habia desarrollado un sarcasmo cillit bang con el que intentaba limpiar, sin lograrlo, su corazon enquilosado por el oxido del odio. Odio a si misma por acceder a acojerle y odio al mundo por haber osado tratar asi a su hijo. Ni siquiera se atrevio a darse la vuelta para mirarle a la cara, siguio pelando patatas.

-"Mama... perdona, pero eso te pasa por no llamar antes dentrar". Dijo el, acostumbrado como estaba a estar rodeado de abogados.

-"... Podrias echar el pestillo, hijo, que parece que lo haces a posta y una madre no tiene por que ver esas cosas, que ya tienes edad Alvarito, que si te hace falta dinero pa putas yo te lo doy, hombre, ya nos apañaremos". Respondio la madre, sin darse cuenta que en ese momento caia en la cuenta que a lo mejor eso era precisamente lo que su hijo pedia a gritos con sus actos desesperados. Suspiro. "Tortilla de patata", concluyo, meneando la cabeza de lado a lado como los perrillos esos que la gente diferente pone en los salpicaderos de sus opeles corsas. "Ahi en el monedero hay 30 euros, tienes suficiente?", dijo, al tiempo que la diapositiva de su hijo en el suelo del baño se volvia a proyectar en la pantalla de su cerebro en blanco.

-"Gracias". Respondio el de inmediato. Se arrimo a su madre por detras e hizo como que la daba un abrazo, pero cuando fue a darle el beso en la mejilla ella aparto la cara con asco, como si el que la fuera a besar fuera un corredor de bolsa sudado. Y encima con bigote y apestando a habanos.

-"Y a ver si levantas cabeza hijo, que desde que paso lo que paso nos tienes preocupados". Dijo ella, en tono triste y desesperado.

-"Tranquila, quen cuanto me salga algo me busco un piso de alquiler y no vuelvo a molestar. Todavia me queda algun contacto". Sonando mas como si el mismo se lo estuviera preguntando, sabiendo de sobra la respuesta, que no, que habia sido abandonado.

Que cada perro se lama su pijo, ques a lo que iba...

Al poco tiempo

-"Haztelo mirar que no es normal", le decia su mujer todas las mañanas. Todas y cada una desde que se casaron. Bueno, menos cuando no, menos cuando volvia a las tantas de tocar en algun pueblo y se dormia en el sofa del salon para no despertarla. Pero eso ella no lo veia, a que no?
-"Joder que pesada eres, Oli". Respondia Alfredo. Amodorrado, sin ganas.
El caso es que Al (para los amigos) reconocia que cuando dormia respiraba fuerte. Con ocho años le habian dicho una vez que fue de acampada que sus ronquidos eran como cuando ruge el leon de la Metro, en celo (a los ocho años la imagen de un leon recubierto en celo le acompaño una larga temporada). Ya de mayor le comento alguna novieta mas o menos seria, de las de polvo en casa de los padres aprovechando questan en el chalet de la sierra, que era mas como los motores de un Airbus comprado en el e-bay al enfilar la pista de despegue (es lo que tiene enrollarse con tias con gafas). "Como tu puta madre", decia Oliva, con el asco que da la confianza.
Asi es que Al recibio un ultimatum y, como no queria tener que plancharse la ropa, ni hacerse la comida, fue al medico. Este le puso en lista de espera desespera con el especialista. Y a los siete meses le dieron cita. Por la mañana temprano. Y alli estaba, medio dormido por culpa de su apnea y dolorido por las patadas que Oli le daba (a veces se preguntaba si con su Oliva no habria pinchado en hueso, pero se le pasaba). Busco Roncologia por todo el Policlinico pero no lo encontraba. Pregunto y le mandaron a la tercera planta. Alli, tras cuatro horas esperando en las que se debio quedar traspuesto encima de su copia del Melody Maker, salio una enfermera que al verle solo en la sala le pregunto si no le habian llamado. Al no quiso decir que se habia quedado dormido, asi que dijo: "No".
-"Pues pase, pase antes de que se vaya el doctor Saldaña".
A los tres meses le llamo el medico de cabecera diciendo que ya tenian los resultados.
-"Sientese Alfredo, sientese", le dijo. El puto crio, recien salido de la facultad y con unas ojeras de coca que parecian hamacas.
-"Tiene usted cancer de prostata". Le solto, sin mas.
-"Que que?!", respondio Al, completamente despierto por primera vez en los ultimos treinta años.
-"No se como, pero estuvo usted en Oncologia y aqui esta el informe del doctor Saldaña... (pausa para pasar hojas)... aqui esta, bien clarito, cancer de prostata". Las dos ultimas silabas sonando como tiros de gracia.
-"Pero si no es posible, pero si yo no fumo!", dijo Al, confundido, medio indignado.
-"No se, quiza, y no se crea que es la primera vez, sea debido a llevar pantalones de pitillo", respondio el niñato.
Y Al se fue a casa, maldiciendo por el camino su afan por estar a la moda, maldiciendo a su Oliva por darle tanto la brasa con lo de que roncaba, maldiciendo el error de haber dado por seguro que por ser el seguro se les habria caido la R.
No dijo nunca nada. Pero se le acabo cortando la mayonesa.

Y en consecuencia Al y Oli se separaron.

Que que fue de Al? poco tiempo.

Que que fue de Oli? Abrio una panaderia. Pan Oli!! (ques a lo que iba)

El fin justifica los miedos?

Yo no sabia de Finlandia hasta que me tope con Asko y su tupe (lo se, dificil de creer, pero es que se llamaba asi joder) en una convencion de pilotos de rally a la que gracias al inexistente dios, Carlos Sainz no llego de puto milagro. Fue el, Asko, quien me explico muy serio una de las raras veces que me chapurreo en ingles, que en su pais normalmente o te suicidas o te conviertes en piloto de rally, a alguno incluso le daba por suicidarte despues de haberse convertido en piloto de rally, pero nunca al reves, o al menos eso creia, no tenia datos, lo iba a mirar en internet por si acaso. O eso crei entender.
A mi hasta entonces como que Finlandia me quedaba lejos, no solo en el aspecto geografico, de por si ya a tomar por culo, pero tambien en el plano puramente mental, piensalo, Fin landia, es que su propio nombre lo indica coño, el fin del mundo, el hasta aqui hemos llegado, el rien ne va plus. Tiritaba solo de pensarlo.
Asko, decia, resulto al principio ser un tipo introspectivo pero que cuando cantaba en la ducha sonaba bien, un estereotipo en mono, si, pero un mono estereotipo, tan rubito el, tirando mas a albino que platino (mas al vino que romina power, yo que se... ).
Yo no, yo estaba alli de asistente de catering, silver service, pasando coca entre canape y canape. Y pense que si en Laponia el la ponia y yo me reia de pensarlo, aqui en Granollers tambien, asi que ni que decir tiene que despues de darle el polvo se lo eche. Me lo lleve puesto a casa, donde Asko siguio desafiando su nombre, comiendo y dejando comer, sin importarle los granos, yes. Los nordicos ya se sabe, aparte de dar calorcito, son de un educado que tira pa tras, asi que yo me dejaba hacer, pa tras pa lante, mientras se me tirara no tiritaba tirititran tran tran, solo de placer. En sus manos mis orgasmos eran los de una clepsidra achampanada dando las campanadas de nochevieja, mis cuartos (traseros) repicando acalambrados cual carrillon, "carry on!".
Pero no pudo ser y la novedad del Kinky de Helsinky, que asi es como le empezaron a llamar mis colegas sin conocerle nada mas que por lo que yo contaba en la faculta los ratos que me dejaba ver, empezaba a oler. No se, igual me estoy amariconando, pero tras tanto polvo magico echaba de menos poder conversar con el, quiza fuera eso lo que me diera mas por culo per se (aunque ahora que se ha ido se que perse es culo en fines, en fin, es lo que tienen las lenguas barbaras -y el fines es la lengua barbara rey- que al final te dan por el perse metaforico y lo confundes con el culo, per se o no se). El caso es que that is the question, que no lo se (me puede repetir la pregunta?). Y cuando Asko dejo de darme perse y me empezo a dar asco per se, joder, al final lo estaba poniendo todo perdido, (ya no tenias bastante con que te meara... no) me harte, me ralle y le suicide.

A lo que iba nobstante, Finlandia, que gran pais...

A head ahead

Ultimamente se me va la cabeza, se me va y no me dice a que hora tiene pensado volver, ni con quien anda, ni tan siquiera el usual "no mesperes despierta".
Ha pasado otras veces y nunca le he dado demasiado importancia (bueno, lo normal, yo a veces tambien he necesitado aire fresco en la entrepierna), pero siempre nos hemos contado todo y ahora ya no me lo cuenta, me da que es mas que la tipica canita al aire. La veo tumbada en el sofa meditativa y la pregunto que en que esta pensando y "en nada", siempre me con testa, evasiva como los ojos de Dioni, como una momia. No se, con la emporrada de años que llevamos juntos, con las que hemos pasado, buenas y malas, que ahora de repente le de por irse por ahi sin decirme nada, que luego vuelva y cuando le pregunte donde andaba me responda como si la rara fuera yo, a veces incluso de malas maneras, no solo no me mola sino que me da que estoy perdiendola, la cabeza. Y mira que a estas alturas no se quien coño se va a liar con una cabeza como la mia, con ese bagaje de traumas, de complejos, de rarezas y con esos pelos....
En fin, que temo quel dia menos pensado se vaya por ahi y no vuelva, que me deje. Y aunque soy consciente que se dice mucho en estos casos, en el mio es cierto, yo no puedo vivir sin ella. Que angustia. "Te necesito cabeza!!"

Espera, creo que llaman a la puerta...

Papa pitufo! Pa papi tufo!

Hacia meses que lo esperaba con curiosidad y ansia. Habia hablado con sus amigas y leido de pe a pa los articulos del SuperVale. Incluso se atrevio a buscar informacion en el guguel tras alguna que otra clase de informatica. Se llego a plantear si rebuscando entre las broncas diarias encontraria el momento excusa para hablar del tema con la nueva mujer de su padre. Aunque sabia de sobra que no, que nunca se rebajaria a darle ese gustazo, estando como todavia estaba ese "si quieres, podemos ser colegas" fresquito, rayandole el suelo del cerebro recien encerado, rechinando. "Impostoraijadeputateodio".
Para volver a llenar el vacio de la ausencia como solo puede llenarlo una niña de sus años, desconsoladoramente llorando y llorando.
Al final, como no podria ser de otra manera, nada ni nadie la preparo para que cuando por fin llego el momento este resultara ser tal cual lo pintaban en los sicotropicos anuncios de compresas. Sijasi, su primer periodo le vino azul, como le vino a Picasso. No se lo esperaba, y desconcertada y desconocedora por completo de su descendencia directa de Sissi emperatriz por parte de madre, achaco aquel manchon añil de paquete de 20 bolis bic cristal del todo a un euro destintados a haber llevado toda su vida bragas Princesa.
Tras el susto, el asco, el enjuague en el bide y la falda del uniforme en la lavadora ya cargando, sonrio complice al espejo y se sintio como una reina.
Sexploto el grano. Se arreglo (pero esta vez de ponerse guapa, si, si, incluso con granos). Se puso una ausonia noche de Siquierespodemosercolegas y, sin reponerse a la extrañeza de llevar aquello entre las piernas, le mando un mensage a su novio que salia en media hora de la academia de idiomas para que fuera a buscarla con la moto.
Hasta aquel dia nunca habian pasado del quitame alla esas pajas, pero aquella tarde noche, tras el porrillo y las toses, en aquel edificio de urbanizacion a medio acabar por la constructora en quiebra y el director en Varadero desconocido, echaron un polvo vertiginoso ("ay!", "aaah", "ya?", "ya", "pues vaya...")

... pero en toda regla (ques a lo que iban).

Y el principe azul y colorin colorado...